El curl nórdico o Nordic Hamstring Curl es uno de los ejercicios más efectivos y respaldados por la ciencia para fortalecer la musculatura isquiosural y reducir el riesgo de lesiones en futbolistas. En centros de alto rendimiento como FB Training, este ejercicio se incluye en programas de preparación física personalizada para deportistas que buscan mejorar su rendimiento y prevenir recaídas.
Beneficios del curl nórdico en el fútbol
1. Prevención de lesiones en isquiotibiales
Estudios como los de Petersen y Bahr demuestran que puede reducir las lesiones en isquiosurales entre un 50 y 70%. Esto se debe a su capacidad para fortalecer el músculo durante contracciones excéntricas, especialmente útiles en acciones como sprintar o frenar.
2. Fortalecimiento excéntrico
El curl nórdico entrena directamente la capacidad del músculo para resistir alargamientos rápidos, lo cual es fundamental en los movimientos bruscos de desaceleración y cambios de dirección.
3. Mejora en la aceleración y velocidad
Unos isquiotibiales fuertes excéntricamente permiten una mejor aplicación de fuerza al suelo, favoreciendo una mecánica de carrera más eficiente y segura.
4. Estabilidad lumbopélvica
Además del beneficio muscular, este ejercicio ayuda a mejorar el control del tronco y la pelvis, optimizando los movimientos funcionales durante la competencia.
5. Implementación sencilla
El curl nórdico puede realizarse sin equipamiento complejo, utilizando solo un compañero o una barra para fijar los tobillos, lo que lo hace ideal tanto para clubes como para entrenamientos individuales.
¿Por qué incluirlo en la rutina?
El fútbol exige sprints, frenadas y giros constantes que sobrecargan los isquiosurales. Muchos futbolistas presentan déficits de fuerza excéntrica, lo que aumenta el riesgo de lesiones. El curl nórdico aborda esta necesidad de forma directa, económica y con respaldo científico.
En FB Training, este tipo de trabajo es parte fundamental de los programas de prevención de lesiones, especialmente en nuestros planes personalizados para deportistas profesionales y amateur.
Recomendaciones de uso
-
Frecuencia: 1–2 veces por semana durante toda la temporada.
-
Volumen inicial: 2–3 series de 4–6 repeticiones.
-
Progresión: Variantes como asistencia con banda, brazos extendidos o pausas pueden implementarse a medida que se mejora la técnica.